Primero, imagínatelo
La adquisición de un nuevo traje no empieza en la tienda, sino en tu cabeza. ¿Es un traje de trabajo? ¿Para una cita por la noche? ¿Para la boda de tu amigo? ¿Las tres cosas? Si sabes estas cosas podrás tomar las decisiones correctas, empezando por el color.